La coalición Sumar critica la aprobación de una tasa turística «descafeinada» por parte de PNV y PSE-EE
El parlamentario de la coalición Sumar en Euskadi, Jon Hernández, ha defendido hoy en el Parlamento Vasco la necesidad de implantar una tasa turística que «grave al turismo que dificulta la vida de los vecinos y las vecinas de Euskadi».
Durante su intervención, el también responsable de Acción Política de Ezker Anitza-IU ha afirmado que esta medida permitiría hacer frente a los gastos adicionales que el turismo genera en los municipios, como la limpieza viaria, la gestión de residuos o el transporte público.
Sin embargo, ha denunciado que esta iniciativa, transaccionada entre la coalición Sumar y EH Bildu, ha sido bloqueada nuevamente por los votos del PNV y PSE-EE, que han aprobado una Proposición No de Ley (PNL) «descafeinada».
La Proposición No de Ley transaccionada entre la coalición Sumar y EH Bildu buscaba la creación de una tasa turística en Euskadi que gravara las pernoctaciones en establecimientos de hospedaje, con el objetivo de hacer frente a los gastos adicionales que el turismo genera en los municipios.
La propuesta apostaba por un modelo de impuesto progresivo, donde el gravamen variara según la tipología o nivel del alojamiento, asegurando que los ingresos obtenidos se destinaran a mejorar los servicios públicos y las infraestructuras municipales.
Esta PNL destacaba por proponer que la gestión de la tasa turística quedara en manos de los ayuntamientos, permitiendo que fueran los municipios quienes decidieran cómo redistribuir los fondos obtenidos para mejorar la calidad de vida de sus vecinos y vecinas. Además, la propuesta insistía en evitar que la carga económica que genera el turismo recayera sobre la clase trabajadora, asegurando que los gastos derivados del aumento del turismo fueran cubiertos por los propios visitantes.
El parlamentario ha subrayado también la «falta de determinación» del Gobierno Vasco para implementar un impuesto sobre las pernoctaciones turísticas, una propuesta que, según ha señalado, Sumar lleva defendiendo desde hace más de una década tanto en instituciones locales como en el propio Parlamento. «Es necesario que los gastos que genera el turismo no recaigan en las espaldas de la clase trabajadora de este país», ha subrayado.
En su discurso, el parlamentario ha lamentado que mientras el turismo crece de forma desmesurada en Euskadi, alcanzando los 4,5 millones de visitas en 2023, las localidades más afectadas, como Donostia y Bilbao, siguen sin contar con un impuesto que alivie la carga económica que soportan sus vecinos y vecinas. «El modelo que proponemos tiene que servir para que los recursos obtenidos se destinen a rebajar esa carga y mejorar los servicios públicos», ha defendido.
Por otro lado, Hernández ha expresado su preocupación ante la posibilidad de que el Gobierno Vasco implante una tasa que no responda a estos principios, alertando sobre el riesgo de que los ingresos se utilicen para «ayudar a la competitividad del sector» en lugar de aliviar los gastos municipales. Además, ha denunciado que el PNV y el PSE-EE continúan «arrastrándose» ante las presiones de la patronal hotelera.
Por último, ha reiterado que el impuesto turístico debe ser gestionado por los ayuntamientos y no por el Gobierno Vasco, garantizando que los fondos obtenidos beneficien a las y los ciudadanos y no se privaticen en favor de agentes privados.