Elkarrekin Podemos ve estancamiento en los resultados de la Evaluación Diagnóstica 2017 y critica la autocomplacencia del Departamento de Educación durante la comisión parlamentaria de hoy. Iñigo Martínez, parlamentario de IU en Elkarrekin Podemos, ha afirmado “que ya es hora de actuar y poner en marcha medidas estructurales que contribuyan a transformar el sistema”. Martínez ha resaltado que la variable que más influye en los resultados del alumnado vasco es el nivel social, cultural y económico de las familias señalando que “en este informe, nuevamente, queda en evidencia que el ISEC influye en la diferencias de resultados entre centros de distintas redes en Euskadi”.
Asimismo, Elkarrekin Podemos ha mostrado su preocupación sobre los resultados del alumnado de primaria. “Los resultados globales continúan empeorando en mate, euskera, castellano e inglés y sólo mejoran ligeramente en ciencias” ha afirmado Martínez.
Por último, el parlamentario de Elkarrekin Podemos ha criticado que el Departamento de Educación les haya enviado el informe ejecutivo de 119 páginas con apenas un día disponible para su revisión. “Es un informe importante para la mejora del sistema educativo vasco y es una pena disponer de tan poco tiempo para su revisión” ha señalado. Por su parte, Cristina Macazaga, parlamentaria de Elkarrekin Podemos, ha intervenido en relación a los resultados del protocolo de prevención de la Mutilación Genital Femenina en el ámbito educativo.
Según Macazaga, la Mutilación Genital Femenina está reconocida internacionalmente como una violación de los Derechos Humanos y de la Infancia, así como una forma de violencia machista que refleja una gran desigualdad entre sexos y constituye una forma extrema de discriminación de la mujer.
Macazaga ha puesto en cuestionamiento la suficiencia del protocolo y ha aludido a la necesidad de dotar de más recursos al “Plan Director para la coeducación y la prevención de la violencia de género en el sistema educativo”. Elkarrekin Podemos considera necesario poner en marcha medidas preventivas, en coordinación con diferentes organismos públicos, que contribuyan a fortalecer a las mujeres adultas, niñas y adolescentes para que ellas sean las protagonistas de los procesos y su erradicación, sin imponer estrategias.