Ezker Anitza-IU se ha movilizado en el día de hoy junto con los trabajadores y trabajadoras del Grupo CEL para reclamar a la Diputación Foral y el Gobierno Vasco que “se impliquen para lograr mantener los más de 300 empleos en juego”.
En este sentido, el parlamentario de Ezker Anitza-IU en el Parlamento Vasco, Jon Hernández, ha acusado al Gobierno del PNV-PSE de ser el “responsable directo de que ahora estén enfrentando un ERE de extinción”, ya que “el Gobierno Vasco controlaba el 45% de las acciones del Grupo”.
Hernández ha considerado que el Gobierno de Urkullu tiene “herramientas suficientes para garantizar el empleo y la continuidad de la empresa”, que califica de “rentable” a la luz de los resultados “positivos” en los años 2014, 2016 y primer trimestre de 2017.
Así, la “inacción del Gobierno de Iñigo Urkullu va a provocar que 300 familias se vayan a la calle” y que “empeore la situación en Enkarterri”, una comarca que “sigue sufriendo cierre de empresas y un nivel de desempleo industrial galopante”.
El parlamentario de Ezker Anitza-IU ha recordado que “solo en Bizkaia” hay “en juego” más de 2500 puestos de trabajo con “los conflictos de CEL, General Electrics, o La Naval de Sestao”. “Lejos de ser una cuestión puntual, Euskadi sufre un ajuste industrial que puede ser el golpe decisivo a la industria vasca, en claro retroceso”, ha apuntado.
El PNV sin proyecto industrial para Euskadi
Hernández ha denunciado que “el PNV no posee una política industrial para Euskadi” y que “se mantiene parado” mientras “mantiene un modelo industrial completamente volcado en el capital extranjero, que no está dudando en deslocalizar su producción con el único fin de agrandar sus cuentas de resultados”.
En este sentido, el miembro de Ezker Anitza-IU ha sostenido que el plan de choque del Gobierno Vasco es un “fraude”, ya que simplemente es un “reciclado del plan de industrialización 2014-2016, un resumen del programa marco de empleo y reactivación económica, y del acuerdo de gobierno“.