La diputada de Izquierda Unida y Coordinadora General de Ezker Anitza-IU, Isabel Salud, ha respaldo esta tarde la reforma del Reglamento del Congreso para que se dé más valor a las iniciativas parlamentarias sin rango que ley que consiguen aprobar los grupos de la oposición ante el reiterado incumplimiento del Gobierno del PP hacia ellas. Salud consideró necesario “subsanar” lo que tachó como “grave problema de nuestro parlamentarismo”, al tiempo que denunció que el Ejecutivo de Mariano Rajoy “se muestra insumiso” ante estas iniciativas “que se quedan en el plano de lo simbólico, con el consiguiente desconcierto y frustración de la ciudadanía”.
La parlamentaria de IU y Coordinadora General de Ezker Anitza-IU intervino en nombre del Grupo Confederal de Unidos Podemos para confirmar su apoyo a la iniciativa del PNV sobre esta cuestión, aunque señaló que es insuficiente y se queda corta. En concreto, explicó que “los mandatos expresos del Legislativo al Ejecutivo en forma de mociones, proposiciones no de ley o resoluciones aprobadas no suelen cumplirse.
El Gobierno, en situación de minoría parlamentaria, no cumple con lo que le ordena el Congreso”. Salud denunció en su intervención que “en esta Cámara se nos dice que se expresa la voluntad popular. El Gobierno, sin embargo, lo dice para después ignorarlo y lo hace justamente, casualidad, para aquellas iniciativas que defienden los intereses de la mayoría social trabajadora de nuestro país”. La parlamentaria de IU aprovechó para criticar duramente la política del PP, de quiénes aseguró que “el señor Rajoy jamás ha gobernado pensando en las mayorías; es un Gobierno al servicio de las minorías poderosas, de las élites y de la Banca”. De ahí su apuesta por “transformar de raíz” las actuales maneras del parlamentarismo que se lleva a cabo. “Por eso -adelantó- nuestro grupo confederal ha iniciado ya el trabajo necesario para reformar profundamente un Reglamento que acoja una representación política más democrática y ligada a la ciudadanía.
Una modificación que aseguré una efectiva separación de poderes, con un Legislativo que cuente de verdad, capaz de controlar de manera efectiva al Ejecutivo y aprobar leyes que sean fruto de una discusión ágil, atractiva y rigurosa”. Isabel Salud detalló que esta reforma frente a un “Reglamento rígido y obsoleto como el actual” resulta “clave para convertir la Cámara en un espacio de auténtica deliberación, en un motor participativo y en un franco apoyo para una nueva cultura política.
Por eso queremos reforzar al Parlamento frente al rodillo del gobierno, de cualquier gobierno, porque no queremos más leyes parlamentarias sin parlamento”.
Resumió que “queremos mejorar la deliberación como elemento fundamental previo a la ejecución de cada política, como reflejo respetuoso de la pluralidad del país: debates menos rígidos, más ágiles, con menores ventajas para el Gobierno. Facilitemos la función parlamentaria de control, introduzcamos controles claros para evitar la insumisión del Gobierno frente a un mandato claro del Congreso. Introduzcamos códigos éticos, renovemos el espacio simbólico de este palacio, pongamos la historia política de las mujeres, antifascistas y demócratas de este país donde merece en este ya siglo XXI”.